Potencia su división de reestructuraciones en España.

La consultora estadounidense FTI, que cotiza en Nueva York con un valor de mercado superior a los 1.500 millones de dólares (1.154 millones de euros), ha lanzado la división de Recuperaciones e Insolvencias en España, enfocada en la recuperación de valor de compañías en procesos concursales y restructuraciones fuera de concurso.

La compañía se ha asociado con las firmas Peñafort Legal y Financiero, Pentalegis y Audalia Auditores para crear un equipo especializado en procesos concursales, liderado porSergio Vélez.

“Nuestra aspiración es hacer ahora en España lo que hacemos en procesos concursales en los mercados anglosajones, más dirigidos a una reestructuración que a una liquidación”, explica el directivo de FTI.

La nueva Ley Concursal está enfocada a permitir la supervivencia de compañías declaradas en concurso (hasta ahora más del 90% de las empresas en España que se declaran en concurso acaban en liquidación). “Incluso ahora”, apunta Sergio Vélez, “el nuevo Real Decreto que afecta a la ley concursal permite que en procesos de liquidación pueda venderse la unidad producitiva”.

El Consejo de Ministros aprobó el viernes 5 de septiembre un Real Decreto Ley sobre medidas urgentes en materia concursal. Entre otras medidas, el decreto divide a los acreedores privilegiados en cuatro clases a la hora de votar la aprobación de un convenio propuesto, distitnguiendo entre acreedores laborales (los trabajadores), públicos (suelen ser Hacienda y la Seguridad Social), financieros (los bancos prestamistas) y el resto (proveedores, clientes…). Para que salga adelante un convenio propuesto será suficiente con contar con el apoyo de entre el 60% y el 70% de estos acreedores.

Hasta ahora se había avanzado que la nueva Ley Concursal iba a regular un registro de administradores concursales, en el cual los profesionales que quisieran ocupar cargos de administrador concursal debían cumplir una serie de requisitos. Sin embargo el Real Decreto publicado a principios de este mes no hace referencia alguna a esta posibilidad. “Si así fuera”, comenta Sergio Vélez, “FTI se apuntaría a ese registro para poder formar parte de administraciones concursales”, señala.

FTI emplea a 2.800 personas en 24 países. En España este año asesoró a Grupo Gallardo en la venta de unidades y financiación aportada por la sociedad de capital riesgo KKR.

Fuente: Cinco Días